viernes, enero 12, 2007

Un Verbo...

Un ángel en mi último sueño me dijo que nada era necesario, pues todo el castellano ortodoxo estaba en mi contra. En ocasiones me preguntó cual es la razón del porque le doy tanto poder a esas nomenclaturas de pasiones desbordadas...

Ambos esperaban una respuesta, pero como habitualmente ocurre, no aparecieron. Ayudé un poco a que lo funesto de todo fuera el mayor de los ejemplos; caí nuevamente en las garras de un maldito verbo que parte el alma, sufre y deja vivir. Habitualmente sigue llorando.

Él, me dijo que, sólo conoce lo que le ha mostrado en adversas situaciones en que ha tenido que consentir la cabeza y caminar por las rutas plagadas de olores que detesta. Sabe de otras implacables verdades.

En ocasiones y en la oscuridad de mi noche, reclamo lo que oculta, lo que nunca arriesgo y lo que intuyo que existe y se niega. Existe cuando se está al corriente de donde proviene esa forma de expresión o de donde nace tal magnifica señal inequívoca de una despedida para el rostro, las manos y el corazón que pretende por un algo que conoció un día.

Es estar cansada de perder sin lograr que te quieran.

Quizás no deba disipar tiempo en reclamar por la otra cara que nunca comparten o por la otra historia; esa que de a poco llevan secreta en la sangre. Esa otra mitad de espectro sufrido que a nadie han querido mostrar.

Porque sólo conozco lo que le han expresado a mis ojos. Tan sólo calzo muchos puntos hacia lo que pude tocar con mis manos, en una nube llena de miradas que se complicaron por mentiras rojas. Observaciones de sangre que provenían de otros ojos.

Pero hoy, quiero otra verdad. La que a nadie le han dado porque aprendí a conocer lo que pude besar con mis silencios. Uno nunca está preparado para oír una despedida.

Yo reclamo de ella la otra parte, la que es menos perfecta y brillante, la que guarda egoísmo y misterios, la que le hace persona y amante.

Reclamo el testimonio de saber que es posible que falle aunque lo ha hecho un millón de veces. Esa otra mitad que muestra que no es tan sólo un paisaje comprometido con una mano demasiado inteligente y poderosa para combatir con ella.

Estoy atrasado para ser fugaz o eterno, porque si lo piden puedo ser un mar o el desierto necesario. En contraparte, si me ignoran puedo ser ese verbo malherido, una palabra o aquel silencio radical y descomprometido.

Aprendí a ser un hombre con rostro de fantasma que aparecía por las noches en la alcoba, besaba una mejilla y huía. Quise ser un pedazo de carne en la tierra o un cielo nublado y a punto de llover. Preferí huir.

Puede ser un tornado o la brisa que golpeaba la cara en la mañana del ocaso. La lágrima o la risa que solía aparecer en momentos en que mis propios dolores me pedían explicaciones. Quise ser un amado que puedo ser hoy y el ayer, para siempre e incondicionalmente un mañana.

El sol para el frío de los sueños, el aire que daba vida en cada necesario respiro. Un mal guía y un camino pavimentado. Puede ser de lo que quisieron; la nada o un infinito.

Tal vez, una brújula o un puerto despoblado. Corrompí a la propia ley y al credo que no creo. Una almohada que guarda secretos dentro de su felpa cochina o un escudo con su respectiva espada que se entierra en pleno pecho. Destrozando todo por dentro.

Quise ser necesario y necesitado, sin dejar de ser yo mismo. Sigo creyendo que es fundamental que a la gente que amo nunca le pase nada. Pero si voy a dejar que le pase de todo, aquí, conmigo.

La verdad de esta historia es que merezco todo lo contrario, porque aún no he encontrado el pretérito imperfecto de aquel verbo llamado amar...

6 comentarios:

Anónimo dijo...

renatito...
siempre tan melancolico...
no se si algun dia te iras a cansar de serlo...
cuando lo hagas avisame...
te estoy esperando

Anónimo dijo...

está muy lindo eso que escribiste... te basaste en la canción de axel
creo que ambos esperamos lo mismo.
besotes
besotes
big kisses
pamelita

Anónimo dijo...

mi pregunta es desde dónde escribes... ¡mentira!, tengo más preguntas.... ¿cuándo escribes? y ¿a qué hora?...
necesitamos saber el contexto, sobre todo esta pioja, próximamente profe de historia...

será después de una resaca, o en esas noches en las que a nadie se le ocurre salir...

Anónimo dijo...

y, huevoncito, venís o no?

Avisáme, para vernos...

Anónimo dijo...

eso es argumento, gracias por la respuesta.

Anónimo dijo...

Tu blog tiene un encanto único....vendré seguido a visitarte..

cariños.

Trilce